Desde hace unos días, Vigo cuenta con un mural de homenaje a O Marisquiño, realizado en una semana por el artista Pow One con la ayuda del también graffitero PrimAsten. Juntos y gracias a la iniciativa Vigo cidade de cor, han levantado la figura de un skater de 15 metros de altura en la calle Coruña. Desde la organización hemos querido conocer más detalles de la obra hablando con su creador. 

¿Qué te inspiró para hacer el mural?

Cuando trabajo para algún cliente suelo preguntar 3 o 4 cosillas para saber qué les gusta, qué quieren, qué idea tienen... y con eso me pongo manos a la obra. En este caso, a grandes rasgos, se trataba de hacer un mural que representara a todas las personas que hacen posible O Marisquiño. Para ello pensé en poner el logo en la cara para hacerlo impersonal pero a su vez que todo el mundo se pudiera sentir identificado con ello. 

Además la dejaste para el final...

Sí. Pensamos que crearía una cierta intriga dejar esa parte para el final y que la gente pensara "qué van a hacer ahí". Además, como me ayudó Asten y él es diestro y yo zurdo, lo fuimos haciendo rollo fotocopiadora, lo que le añadió algo más al proceso. 

¿De qué otros detalles nos podrías hablar?

Pues que lo he querido integrar en la zona. Todo lo que hay justo debajo del muñeco es un esquema de lo que se ve en la rotonda: las farolas son las mismas, por ejemplo; y el edificio de al lado en negro, es el mismo perfil de los que conviven con el mural. El hoody, la calle, el skate... son cosas con las que todos nos sentimos identificados. 

En una semana lo tuvisteis listo. ¿Estáis contentos con el resultado?

Siempre que te expones tienes la duda de si le gustará o no a la gente y a veces se crean expectativas brutales que pueden ir en tu contra, pero en este caso todos los comentarios que hemos recibido son buenos, así que todo bien. 

Tu relación -y la del graffiti- con O Marisquiño va más allá de este mural. ¿Qué nos puedes decir al respecto?

Yo patinaba cuando era un chaval, pero era muy patoso, así que no me he dedicado a ello. Sin embargo, siempre me ha gustado el rollo y me he rodeado de gente que sí sabe muchísimo de skate o de surf, así que forma parte de mi vida.

Desde hace 3 años he ido colaborando con la parte de graffiti del festival, desde las exhibiciones a pintar el Dirt, hacer el branding de las pistas, los talleres de niños... 

¿Qué futuro le ves a la relación?

Muy buena. Cada año va a más. Sin ir más lejos, en 2019 trajimos a Helio Bray, que está entre los 5 más influyentes del mundo. Y van viniendo más graffiteros, gente de galerías y se crea un cultivo, un foco de movimiento del cual estoy satisfecho. Este año íbamos a hacer más cosas todavía y no ha podido ser, pero las haremos en cuanto se celebre. Cuantos más metros y más madera, mejor. Gente y pintura no van a faltar.